La primavera es una de las estaciones más exigentes para el jardín. Las plantas salen del letargo invernal, comienza un nuevo ciclo de crecimiento y se disparan tanto las necesidades hídricas como los trabajos de mantenimiento. Para que un jardín comunitario luzca sano, equilibrado y bien cuidado, es clave actuar con planificación, conocimiento técnico y atención constante. Desde Grupo Ocean, expertos en mantenimiento de zonas verdes en comunidades residenciales, te explicamos cómo mantener jardines comunitarios saludables durante la primavera.
1. Revisión completa del sistema de riego
Coincidiendo con el aumento de las temperaturas, las necesidades hídricas de las plantas empiezan a aumentar, lo que requiere una red de riego totalmente operativa. Antes de aumentar la frecuencia, es fundamental revisar el sistema: comprobar que las boquillas no están obstruidas, que no hay fugas, que la presión es la adecuada y que la programación responde al tipo de planta y a las temperaturas crecientes. Si el jardín combina aspersores, goteo y riego manual, cada elemento debe ser ajustado por separado. Además, los sistemas inteligentes de riego —como los que instalamos en Grupo Ocean— permiten adaptar la frecuencia según la previsión meteorológica o la humedad del suelo, evitando el derroche y asegurando la salud vegetal.
2. Poda de formación y limpieza
Aunque las podas más intensas se hacen en invierno, en primavera es momento de hacer podas de formación para mantener la estructura de arbustos, eliminar ramas secas o mal orientadas, y controlar el crecimiento excesivo. También conviene retirar flores marchitas de plantas ornamentales para estimular nuevas floraciones. Un jardín comunitario bien podado no solo mejora su estética, también reduce riesgos y mejora la salud de las plantas.
3. Control preventivo de plagas y enfermedades
Con el aumento de la temperatura y la humedad, también aparecen insectos, hongos y enfermedades. En Grupo Ocean aplicamos tratamientos preventivos con productos autorizados y técnicas integradas de control biológico para proteger las especies vegetales sin afectar a personas ni mascotas. Especial atención merecen las plagas de pulgón o cochinilla en arbustos y trepadoras.
4. Abonado y mejora del sustrato
La primavera es el momento clave para fertilizar el jardín. Las plantas están en pleno crecimiento y necesitan nutrientes para desarrollarse con vigor. Se recomienda aplicar fertilizantes equilibrados (NPK) según las necesidades de cada tipo de planta: césped, arbustos, florales, etc. En ocasiones, puede ser necesario mejorar el sustrato con compost o materia orgánica para recuperar la estructura del suelo y su capacidad de retención de agua.
5. Reposición de plantas y reestructuración de zonas deterioradas
El paso del invierno suele dejar zonas despobladas, plantas dañadas o espacios que han perdido atractivo. La primavera es el mejor momento para hacer pequeñas reestructuraciones: replantar, añadir flor de temporada, instalar nuevas especies más resistentes o rediseñar zonas poco aprovechadas. En Grupo Ocean asesoramos sobre las mejores especies para cada entorno, teniendo en cuenta el clima, la orientación, el uso y el mantenimiento previsto.
Un jardín comunitario saludable en primavera requiere un plan de actuación que combine experiencia técnica, sostenibilidad y capacidad de respuesta ante los cambios. En Grupo Ocean trabajamos con un equipo especializado en mantenimiento de zonas verdes para comunidades, con herramientas profesionales, sistemas automatizados y un enfoque personalizado para cada espacio.